Ya hace unas semanas que Samsung presentó sus nuevos dispositivos, los Galaxy Note20 y Galaxy Note20 Ultra, y aunque el primero nos dejó algo fríos, no podemos negar que el segundo es firme candidato a convertirse en uno de los mejores dispositivos de 2020.

A unas especificaciones técnicas dignas del mejor gama alta del mercado, se le suma una pantalla sobresaliente. Una pantalla AMOLED de 6,9 pulgadas con resolución 1440 x 3088 pixeles y una tasa de refresco de 120 Hz. Y ahora que Samsung ha tocado el techo con la calidad de su panel, ¿qué es lo siguiente?

Y después de la pantalla del Samsung Galaxy Note20 Ultra, ¿qué sigue?

La pantalla del Galaxy Note20 Ultra es de las mejores del mercado

No hay duda de que la pantalla del Samsung Galaxy Note20 Ultra ha enamorado a todo el mundo que la ha visto. Increíble calidad, buenos ángulos de visión y un color que quita el aliento. Ahora bien, tal y como informan desde SAMMobile algunos expertos de DisplayMate consideran que el dispositivo de Samsung ha tocado techo y que los fabricantes deberían centrarse en otros aspectos a la hora de mejorar las pantallas.

Ellos creen que aumentar la resolución de los paneles y por lo tanto los píxeles por pulgada (ppi) es algo completamente inútil y que solo serviría como política de marketing ya que el ser humano no vería mejora alguna.

¿Lo qué se debería hacer? Mejorar la visibilidad de los paneles en ambientes con luz natural. Desde DisplayMate creen que los paneles AMOLED y LCD se ven perfectamente en ambientes oscuros pero que cuando hay luz, se pierde calidad en los colores y aparecen altos niveles de contraste.

Por desgracia estamos seguros de que las marcas apostarán por aumentar los píxeles y los ppi independientemente de que los seres humanos lo necesitemos o no. Esto mismo ya sucede con las cámaras de fotos y es que, ¿quién necesita 108 megapíxeles en un smartphone?

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